LA INTERPRETACIÓN ESPAÑOL-ITALIANO: PLANOS DE AMBIGÜEDAD Y ESTRATEGIAS

Atrás quedaron determinados planteamientos teóricos y, de alguna manera, dogmáticos que nos inculcaban de manera fehaciente que interpretar no era más que transmitir información fidedigna de algo comprendido y de que el proceso de interpretación no debería contemplarse como una operación sobre las lenguas, sino como una operación sobre lo que se dice a través de las lenguas. De tal manera que sólo la voluntad de comunicar el sentido actúa como un impulso que moviliza, en la lengua materna, todos los medios necesarios para su transmisión: rasgos prosódicos, registro de lengua, etc. Podemos entender que estos planteamientos suponían, en primer lugar, alejarse de las antiguas nociones lingüísticas sobre el proceso traductor negando la existencia de equivalentes automáticos y derivando hacia un enfoque pragmático-situacional. En segundo lugar, suponía un intento loable de sistematizar y explicar el proceso del pensamiento humano cuando se aborda la tarea de interpretar.
No obstante estos planteamientos, así formulados, nos pueden hacer presuponer que solamente el sentido está constantemente presente en la mente sin trazo alguno de cobertura lingüística, ya sea léxica o sintáctica, de la lengua de origen. Igualmente también nos pueden hacer presuponer que no se produce por parte del intérprete, ya sea de una manera consciente o inconsciente, una búsqueda correlativa de equivalentes léxicos o sintácticos en la lengua meta.
Sin embargo, en la actualidad ya sabemos que esto no es una mera presuposición arbitraria, sino que hay constancia de ello. Sabemos a través de la experiencia y de la corroboración empírica que la tarea de interpretar se puede abordar desde múltiples enfoques y perspectivas. Una de ellas es la del paradigma de «lenguas aplicadas y la direccionalidad», y otra, estrechamente relacionada, el paradigma cognitivo de «resolución de problemas», o bien desde la perspectiva traductológica, «la competencia estratégica». Dentro de este marco de estudio, sabemos que el par de lenguas con el que se trabaja y sus características morfosintácticas y socio-culturales, influye a la hora de establecer estrategias eficaces para procesar la información del mensaje de entrada, para buscar equivalencias en la lengua meta durante el proceso de reformulación, para tomar decisiones durante la producción del mensaje meta, y para aplicar determinadas estrategias de utilización eficaz de recursos cognitivos de memoria y atención.
Hoy contamos con estudios empíricos que nos muestran que: a) no se puede hacer abstracción del par de lenguas implicado en la tarea interpretativa; b) que la dirección hacia la que se interpreta y desde la que se interpreta tiene implicaciones en los procesos cognitivos ejecutados por el intérprete; c) que según el tipo de discurso y temática tratada se producen o no determinadas equivalencias léxicas y sintácticas entre el par de lenguas implicado; d) que la combinación de lenguas, sus características sociocultu¬rales y morfosintácticas, tiene implicaciones específicas; e) que el par de lenguas y su dirección, sea hacia la lengua materna o no, condiciona, en definitiva, el aprendizaje y el entrenamiento.
A partir de aquí es obvio intuir las implicaciones de todo esto para la formación y la profesión. Si una ejecución óptima depende en cierta medida de las lenguas de trabajo, entonces la formación debe incluir estrategias y tácticas también específicas para ese par de lenguas. Caso contrario, si la habilidad para interpretar es igual para cualquier par de lenguas, habría unas normas universales y aplicables a cualquier combinación lingüística.
El trabajo que aquí se presenta aglutina de una manera magistral todos y cada uno de los elementos brevemente reseñados anteriormente. La habilidad de la Dra. Mara Morelli para engarzar y aglutinar cada uno de los parámetros que conforman este paradigma de «las lenguas aplicadas y direccionalidad» y «la competencia estratégica para la resolución de problemas» es, sin duda, loable. Por un lado, tomando como paradigma marco «las lenguas aplicadas» ha utilizado los planteamientos teóricos y empíricos que sobre distintos planos de ambigüedad ha venido desarrollando la psicolin¬güística en los últimos años, y los ha aplicado de una manera eficaz al par de lenguas español-italiano en una situación tan dinámica como la de la interpretación. Por otro lado, ha analizado las situaciones de conflicto y problema que se generan según distintos planos de ambigüedad durante la ejecución de tareas simultáneas de interpretación desde el español hacia el italiano para, inmediatamente, proponer planteamientos estratégicos eficaces de resolución de problemas de ambigüedad para este par de lenguas y en determinadas situaciones comunicativas en un programa de formación para intérpretes italo-parlantes.
Finalmente, la Dra. Mara Morelli es valiente al presentarnos un material y unas propuestas metodológicas audaces que reflejan la profundidad con la que se ha planteado el tema de la adquisición y automatización de las estrategias comunicativas para resolver los problemas de ambigüedad que se generan con esta par de lenguas.
Podemos concluir resaltando la especificidad del estudio de la Dra. Mara Morelli, su indudable aportación al ámbito de la formación de intérpretes español-italiano y, por qué no, su indudable aportación para lograr una mayor definición científica y práctica de los Estudios de Interpretación como disciplina académica.

Colección
Interlingua
Número en la colección
88
Materia
Traducción
Idioma
  • Castellano
EAN
9788498367263
ISBN
978-84-9836-726-3
Depósito legal
GR. 3179/2010
Páginas
152
Ancho
17 cm
Alto
24 cm
Edición
1
Fecha publicación
01-09-2010
Rústica sin solapas
12,35 €
Descuento 5%13,00 €