EL TRATADO DE ROMA EN SU CINCUENTA ANIVERSARIO (1957-2007)

El renacimiento en la Europa occidental, tras la segunda guerra mundial, de un fuerte movimiento de opinión favorable a la unificación europea, la necesidad de unirse frente a la amenaza comunista y la ayuda de los Estados Unidos, que vino a suplir las carencias económicas y militares de sus aliados, constituyeron en su día la base sobre la que se apoyó el regionalismo europeo que, a partir de la Conferencia de La Haya de 1948, empezaría a ser una realidad. De entre todas las organizaciones internacionales que por aquellos años se crearon en Europa ?O.E.C.E., Unión Occidental, Consejo de Europa, O.T.A.N.? las Comunidades europeas destacan con luz propia. Entre otras muchas razones porque incorporaron un mecanismo de cooperación hasta entonces desconocido ?la integración? que ha sido imitado con mayor o menor éxito en otras latitudes pero que en Europa, tras cincuenta años de existencia, ha constituido un formidable factor de cohesión económica, de bienestar y calidad de vida y, finalmente, de paz.
Hablar de las Comunidades europeas es, sin duda, hablar del Tratado de Roma, firmado el 25 de marzo de 1957, que dio lugar a la creación de la Comunidad Económica Europea. Es cierto que la creación de la CECA, en 1951, supuso el inicio de la andadura comunitaria y que, al mismo tiempo que la CEE, se creó en Roma la Comunidad Europea de la Energía Atómica. Sin embargo, el carácter sectorial de ambas organizaciones y el fallo de las previsiones que habían llevado a la creación de la CEEA, junto con el poco éxito que la energía nuclear tuvo entre la población europea, puso de relieve enseguida el predominio de la CEE sobre las otras dos Comunidades. En estas condiciones, la fusión de los ejecutivos llevada a cabo en 1965 justificó que se pudiera empezar a hablar de «la» Comunidad y que esa Comunidad se identificara realmente con la CEE.
Los primeros años fueron seguramente los más duros puesto que en ellos hubo que encauzar el enfrentamiento entre los intereses nacionales y la integración comunitaria, pero a lo largo de los cincuenta años de vida del Tratado de Roma no ha dejado de haber crisis e, incluso, retrocesos. El saldo final, sin embargo, es positivo y, entre los elementos que han llevado a que así sea, es preciso destacar especialmente uno: El «arte» con el que el método funcional comunitario ha logrado que cada uno de los pequeños pasos adelante que ha ido dando la Comunidad hiciera necesario el paso siguiente. Se trataba de garantizar así la realización de la bien conocida propuesta de Robert Schuman según la cual «Europa no se hará de una vez ni en una construcción de conjunto. Se hará mediante realizaciones concretas que creen primero una solidaridad de hecho». El mecanismo que incorporaban los tratados constituiría una especie de engranaje que arrastraría, una detrás de otra, las distintas fases de la integración. La unión aduanera empujaría hacia la creación del mercado común, éste llevaría a la unión económica y monetaria y los logros alcanzados forzarían a su vez la integración política. Así es como hasta ahora se han venido superando con éxito las diferentes etapas. Si la eliminación de las barreras aduaneras, de las restricciones cuantitativas y el establecimiento de una tarifa exterior común se llevó a cabo sin gran dificultad, acabar con otro tipo de obstáculos a la libre circulación de mercancías fue más complicado y llevó a que el mercado único no fuera una realidad hasta 1992. Por el contrario, la armonización fiscal, que supuso la sustitución de los diferentes impuestos nacionales sobre el volumen de negocios por el impuesto al valor añadido, y la adopción de medidas para la mejora de la cohesión económica y social, necesaria para tratar de acabar con las profundas desigualdades existentes entre las regiones europeas, fueron relativamente rápidas y sentaron las bases para que se iniciara definitivamente en Maastricht el proceso hacia la unión económica y monetaria. El establecimiento de la moneda única constituye, a nuestro modo de ver, el último éxito indiscutible del proceso iniciado con el Tratado de Roma.
Alcanzados estos objetivos de orden económico, el paso siguiente a dar ha de tener carácter político. El Tratado de la Unión Europea y sus revisiones de Amsterdam y Niza ya han abierto el camino. Los dos pilares intergubernamentales de la Unión Europea ?la Política exterior y de seguridad común y la Cooperación policial y judicial penal? son el desarrollo de aquella Cooperación política iniciada tímidamente en los años setenta que sólo tras la firma del Acta Única Europea, en 1986, obtuvo una base jurídica. La cooperación policial y judicial en materia penal ha progresado y muchos de sus objetivos iniciales ya se han «comunitarizado». No sucede lo mismo con la política exterior y de seguridad. En este punto la situación actual no es satisfactoria, al menos para quienes aspiran a una rápida integración en materias que, como las que son objeto de la PESC, tocan tan directamente al núcleo duro de la soberanía estatal. Pero aunque así fuera, la culpa ya no sería del Tratado de Roma. Seguramente no se han creado todavía las solidaridades de hecho que son necesarias para poder dar el último paso. La progresiva ampliación de la Unión tampoco lo facilita y el rechazo al Tratado por el que se establecía una Constitución para Europa ?en el que lo relativo a la Política exterior y de seguridad común y a la Política europea de seguridad y defensa cobraba un gran protagonismo? augura un futuro incierto en estas cuestiones.
Desde otro punto de vista, es preciso poner de relieve que la Comunidad creada por el Tratado de Roma es algo más que una organización económica. Conecta la prosperidad y los intereses materiales con la defensa de una serie de valores políticos y sociales que son comunes a sus Miembros y que permiten hablar de una identidad ideológica. No solo persigue el desarrollo armonioso, equilibrado y sostenible de las actividades económicas o un crecimiento sostenible y no inflacionista o un alto grado de competitividad y de convergencia de los resultados económicos. También busca algo más cercano al individuo como el pleno empleo o la elevación del nivel y de la calidad de vida. Además, para muchos españoles el ingreso en la Comunidad supuso no solamente el inicio del camino hacia un desarrollo económico que sacaría al país del retraso en que se encontraba con relación a Europa sino también, y tal vez sobre todo, el logro de una homologación largo tiempo deseada que constituía un factor de estabilidad y de seguridad democráticas que garantizaba la Comunidad Europea. Consolidada la transición política, el progreso material alcanzado por España a partir de 1987 carece de precedentes.
En los veinte años que España lleva formando parte de la Comunidad Europea nuestro país ha experimentado grandes cambios que, en gran medida, se deben a la política de cohesión económica y social que, desde la reforma de los Fondos estructurales iniciada en 1988, constituye la columna vertebral de la acción comunitaria. La «terapia de choque» que introdujo el Reglamento 2052/88 sirvió para que la Comunidad concentrara todos los recursos de sus Fondos estructurales en una serie de objetivos y en un grupo de regiones europeas, las más desfavorecidas, entre las que las españolas ocupaban un lugar importante. Las sucesivas reformas fueron aportando más fondos y no solo las regiones españolas objetivo n.º 1 ?las más necesitadas y, por tanto, las que más ayuda reciben de la Comunidad?, aunque éstas sobre todo, han recibido desde entonces miles de millones de euros que han servido fundamentalmente para el desarrollo de sus infraestructuras. Como consecuencia de ello, regiones como Canarias, Castilla y León y Valencia, cuyo producto interior bruto por habitante era en 1988 inferior al 75% de la media comunitaria, hoy han superado esta situación, lo mismo que otras, como Asturias o Murcia, aunque al éxito de estas últimas ha contribuido el llamado «efecto estadístico», es decir, el ingreso en la Comunidad de Estados menos prósperos. Con todo, las primeras seguirán recibiendo durante un tiempo ayuda comunitaria que facilite una salida gradual y las segundas gozarán todavía de un régimen transitorio de ayudas. Paralelamente, el Fondo de cohesión, creado en 1994, ha beneficiado a los Estados cuyo producto nacional bruto per cápita estaba por debajo del 90% de la media comunitaria. Por ese motivo, España, Grecia, Irlanda y Portugal han recibido recursos financieros adicionales. Como resultado de todo lo dicho, hoy nuestra renta per cápita está en el 98% de la media comunitaria, eso sí, en una Comunidad de veinticinco Estados.
El caso español puede ser un buen ejemplo pero, en definitiva, el mercado común que creó el Tratado de Roma constituye hoy una Unión de más de cuatrocientos cincuenta millones de habitantes que pueden considerarse privilegiados porque viven en paz y en democracia dentro de un modelo social y medioambiental que permite una calidad de vida que es, sin duda, la más avanzada del mundo. Por ello no debe extrañar que, al cumplirse su cincuenta aniversario, el Instituto de Estudios Europeos de la Universidad de Valladolid decidiera, a propuesta de su Director, el Dr. Alfredo Allué Buiza, publicar una obra colectiva conmemorativa en la que sus miembros analizaran aspectos concretos de la actividad comunitaria o expusieran su opinión sobre los diversos resultados alcanzados en esos cincuenta años en los diferentes sectores en los que cada uno de ellos se ha especializado. El resultado es el que el lector tiene entre sus manos.
Los trabajos aquí recogidos son la semblanza de esa realidad compleja y cambiante de la Europa comunitaria contemplada por cada autor desde una perspectiva específica. Si se nos permite el símil, se trata de un conjunto de instantáneas en movimiento en las que los autores han elegido los primeros planos sin olvidar los contextos, claroscuros de esa Europa en tránsito, composiciones tamizadas por la luz del pasado y por los destellos del futuro venidero. Y, siguiendo con el símil, al igual que ocurre con el álbum de fotografía, nos ha surgido la duda sobre el criterio a seguir para ordenar los citados trabajos, teniendo en cuenta su elevado número y las diferentes perspectivas desde las que se observa la realidad europea. Así pues, atendiendo al contexto principal de cada colaboración, hemos optado por agruparlos en tres grandes bloques temáticos y en el siguiente orden: Historia, Derecho y Economía, y, para su ordenación dentro de cada grupo, se ha seguido el criterio descendente de los general a lo particular.
En el primer grupo, los tres primeros capítulos nos ofrecen, con perspectiva histórica, una panorámica de las transformaciones en la Europa comunitaria desde la Declaración Schuman hasta la actual Unión Europea. Los profesores Pérez Sánchez y Martín de la Guardia hacen un repaso de las dificultades y retos que Europa ha tenido que afrontar, tanto internamente como frente al exterior. En el capítulo tercero, el profesor Valverde Gómez centra su análisis en los cambios institucionales y de competencias en el ámbito de la administración autonómica en Castilla y León en los veinte últimos años, tras la entrada de España en la Unión Europea.
El segundo grupo de trabajos se dedica al estudio de la Europa comunitaria desde una perspectiva jurídica, realizándose un amplio recorrido desde ángulos bien distintos; podemos decir que se nos ofrece una visión jurídico-institucional desde, prácticamente, todos los campos del Derecho.
Los primeros capítulos se centran en aspectos relacionados con el Derecho Constitucional. La profesora Biglino Campos estudia la evolución de los derechos fundamentales en la Unión Europea desde el Tratado de Roma hasta el proyecto de Constitución europea. El profesor Allué Buiza, por su parte, aborda la evolución y consolidación de la vida parlamentaria europea y plantea el problema que se deriva de la ausencia de un proceso electoral uniforme para elegir a los eurodiputados.
Con el Derecho Internacional como telón de fondo, el profesor Herrero de la Fuente analiza la cooperación política europea, centrándose en su evolución más reciente, sobre todo a partir de la firma del Acta Única. La profesora Corral Suárez repasa la política comunitaria en materia de cooperación y ayuda al desarrollo, su evolución pasada y su perspectiva para el nuevo milenio. La profesora Urueña Álvarez aborda el problema de la ausencia de base jurídica comunitaria en materia de medio ambiente hasta la firma del Acta Única y su regulación y consecuencias en el seno de la actual Unión Europea. Cierra este grupo de trabajos la colaboración del profesor Martínez Pérez que se ocupa de la normativa europea en materia de bienestar de los animales, su regulación y las consecuencias que se pueden derivar en ámbitos comunitarios muy distintos.
Los capítulos siguientes tienen como denominador común el Derecho Administrativo. En el primero de ellos, el profesor Martínez López-Muñiz aborda una categoría paradigmática en el seno de la Europa comunitaria: el Reglamento; así como su consolidación con la exclusión del término «ley» y los efectos políticos que de ello se derivan. El profesor Maceda centra su trabajo en las dificultades que surgen de la, prácticamente, inexistencia de un procedimiento comunitario. El profesor Calonge Velázquez analiza la evolución del proceso de construcción económica y monetaria europea desde una perspectiva jurídica. Por fin, la colaboración del profesor Laguna de Paz se centra en las actuaciones de los Estados que llevan a cabo prácticas que, muchas veces, distorsionan la libre competencia o son contrarias a la misma.
Los tres capítulos siguientes se ocupan de aspectos relacionados con el Derecho Procesal. La profesora de Hoyos Sancho analiza el espacio europeo de libertad, seguridad y justicia. La profesora Vidal Fernández aborda la cooperación judicial en materia civil y la profesora Arangüena Fanego se ocupa del proceso de cooperación judicial en la Europa comunitaria, tanto en la tramitación de causas como en la ejecución de resoluciones judiciales.
Por lo que se refiere a los capítulos que se enmarcan en el ámbito del Derecho del Trabajo, el primero de ellos, del profesor González Posadas, lleva a cabo una revisión de la política social comunitaria desde su exiguo contenido en el Tratado de Roma hasta la Unión Europea. La profesora López-Romero González estudia el problema de la salud y la seguridad de los trabajadores en la Europa comunitaria a lo largo de sus cincuenta años de existencia, su desarrollo normativo y la jurisprudencia que ha surgido al respecto.
El bloque dedicado al análisis jurídico se cierra con cinco trabajos. El primero de ellos, realizado por el profesor Adrián Arnaiz, estudia, desde la perspectiva del Derecho Internacional Privado, el marco de un sistema financiero plenamente integrado como el de la UME. En el capítulo siguiente, el profesor Echevarría Sánchez, tras hacer un repaso de la aplicación del Derecho Mercantil en las distintas etapas del proceso europeo de integración económica, realiza un análisis comparado con el proceso de MERCOSUR. Los trabajos de los profesores Quijano González y Sacristán Represa se centran en el derecho de sociedades en la Unión Europea y, más concretamente, en el gobierno corporativo de las empresas. Termina este bloque temático con el trabajo de la profesora Peñas Moyano; la autora analiza el proceso de integración de servicios financieros de la UME, resaltando los logros alcanzados, pero también llamando la atención sobre uno de los principales problemas que perduran: la financiación del elevado déficit del sistema de pensiones.
Los trabajos de carácter económico, desde el capítulo 24 al final, se inician con tres contribuciones cuyo contenido está relacionado con aspectos presupuestarios de la UE. En el primero de ellos el profesor García Villarejo diserta sobre el perfil doctrinal de la Política de cohesión de la Unión Europea desde la perspectiva del desarrollo endógeno y del desarrollo sostenible. En el capítulo siguiente, el profesor Salinas Sánchez estudia la europeización de las políticas presupuestarias nacionales, la pérdida de soberanía y la mayor disciplina presupuestaria como base de una mayor eficiencia en la gestión de los recursos públicos. Cierra este bloque temático el trabajo de la profesora Vega Mocoroa en el que se repasa el proceso de armonización fiscal en el seno de la Europa comunitaria y se señala la necesidad de eliminar las trabas aún existentes para que el mercado interior logre su plena virtualidad.
A continuación, el profesor Alonso Martínez estudia los problemas monetarios y financieros de Europa y el camino recorrido en estos cincuenta años desde la coordinación hasta la unificación monetaria. Los problemas de la pérdida de actividad y población en el medio rural, así como sus efectos sobre desigualdades territoriales y, particularmente, en Castilla y León debido a la globalización, son estudiados por el profesor Gordo Gómez. La profesor Pedrosa Sanz aborda el problema de la Política industrial que difícilmente puede calificarse de comunitaria por carecer la UE de competencias en esta materia, siendo más exacto hablar de coordinación. El trabajo del profesor Rodríguez Fernández estudia la convergencia y la complementariedad institucional hacia un modelo europeo de «empresa responsable».
Los dos capítulos siguientes versan sobre materia ambiental. La profesora Escudero Puebla analiza las consecuencias que del Protocolo de Kioto se van a derivar para el crecimiento económico en el seno de la UE, en tanto que el trabajo de Blanco Domínguez y Oria de Rueda se centra en la iniciativa comunitaria «Red Natura 2000» para la conservación de la biosfera referida a la provincia de Valladolid.
Se cierra este conjunto de trabajos de contenido económico, y el libro, con la aportación de los profesores Vicente Perdiz y Rubio Sanz en la que se lleva a cabo una revisión sobre el origen, desarrollo y perspectivas del «sistema europeo de cuentas» desde que en 1970 se instaurara el sistema de cuentas integradas hasta la cooperación estadística internacional y sistema de cuentas de la Unión Europea.
Dicho esto, no queremos terminar esta presentación sin dar las gracias a quienes con sus trabajos han contribuido a la realización de esta obra colectiva. También deseamos agradecer el apoyo que el Instituto viene recibiendo de la Dirección General de Economía y Asuntos Europeos de la Junta de Castilla y León, en especial en esta ocasión, puesto que sin su ayuda esta publicación no habría sido posible.

Jesús M. Alonso Martínez
Alberto A. Herrero de la Fuente

PRESENTACIÓN
HISTORIA
EL PROCESO DE INTEGRACIÓN COMUNITARIO EN MARCHA: DE LA CECA A LOS TRATADOS DE ROMA (1951-1957)
Guillermo Á. Pérez Sánchez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . LA FRANCIA DEL GENERAL DE GAULLE Y LAS COMUNIDADES EUROPEAS (1958-1969)
Ricardo Martín de la Guardia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . LA DIRECCIÓN GENERAL DE ECONOMÍA Y ASUNTOS EUROPEOS: 20 AÑOS DE EVOLUCIÓN SIMULTÁNEA A LA DE CASTILLA Y LEÓN EN EUROPA
Víctor Valverde Gómez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . DERECHO
LA EVOLUCIÓN DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES EN LA COMUNIDAD EUROPEA: ALGUNOS ASPECTOS FEDERALES
Paloma Biglino Campos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . CINCO DÉCADAS DE CONSTRUCCIÓN PARLAMENTARIA EN LA UNIÓN EUROPEA
Alfredo Allué Buiza . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . DEL «INFORME DAVIGNON» A LA POLÍTICA EUROPEA DE SEGURIDAD Y DEFENSA. UNA EVOLUCIÓN MÁS APARENTE QUE REAL
Alberto A. Herrero de la Fuente . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . DE LA POLÍTICA DE ASOCIACIÓN AL CONSENSO EUROPEO SOBRE DESARROLLO
Margarita Corral Suárez. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . EVOLUCIÓN DEL DERECHO MEDIOAMBIENTAL COMUNITARIO A LO LARGO DE CINCUENTA AÑOS
Mª Rafaela Urueña Álvarez. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . LA ACCIÓN DE LA COMUNIDAD EUROPEA EN MATERIA DE PROTECCIÓN Y BIENESTAR DE LOS ANIMALES
Enrique J. Martínez Pérez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . LA OPCIÓN COMUNITARIA POR EL REGLAMENTO Y SUS IMPLICACIONES
José Luis Martínez López-Muñiz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ADMINISTRACIÓN COMUNITARIA Y PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO. UNA BREVE REFLEXIÓN 50 AÑOS DESPUÉS DE LA FIRMA DEL TRATADO DE ROMA
Bernard-Frank Macera . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . UN TRATADO PARA ROMA DE 1957 A LA MONEDA ÚNICA: EL PROCESO DE CONSTRUCCIÓN DE LA UNIÓN ECONÓMICA Y MONETARIA
Antonio Calonge Velázquez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ACTUACIONES PÚBLICAS CON INCIDENCIA EN LA COMPETENCIA
José Carlos Laguna de Paz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . LA «PIEDRA ANGULAR» DE LA COOPERACIÓN JUDICIAL EN EL ESPACIO EUROPEO DE LIBERTAD, SEGURIDAD Y JUSTICIA: EL RECONOCIMIENTO MUTUO DE RESOLUCIONES
Montserrat de Hoyos Sancho . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . LA POLÍTICA COMUNITARIA DE COOPERACIÓN JUDICIAL CIVIL
Begoña Vidal Fernández . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . COOPERACIÓN JUDICIAL PENAL EN LA UNIÓN EUROPEA
Coral Arangüena Fanego . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 50 AÑOS DE POLITICA SOCIAL EUROPEA: ESE OSCURO OBJETO DE DESEO
Elías González-Posada Martínez . . . . . . . . . . . . . . . . . . LA SALUD Y SEGURIDAD DE LOS TRABAJADORES EN LA UNIÓN EUROPEA
María Piedad López-Romero González . . . . . . . . . . . . . . REFLEXIONES SOBRE EL PAPEL DEL DERECHO INTERNACIONAL PRIVADO COMUNITARIO EN LAS EMISIONES DE OBLIGACIONES EN LA UNIÓN EUROPEA
Antonio Javier Adrián Arnaiz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . EL DERECHO MERCANTIL EN LOS PROCESOS DE INTEGRACIÓN
Joseba Aitor Echebarría Sáenz. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . «EL DERECHO DE SOCIEDADES EN LA UNIÓN EUROPEA: EVOLUCIÓN Y SITUACIÓN ACTUA»
Jesús Quijano González . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
EL DERECHO DE SOCIEDADES EN LA UE: LA GRAN EMPRESA ( SOCIEDAD COTIZADA Y GRUPOS)
Marcos Sacristán Represa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . DEL TRATADO DE ROMA A LA IDEA DE MERCADO FINANCIERO ÚNICO. UN PROCESO AÚN POR CONCLUIR
María Jesús Peñas Moyano . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
ECONOMÍA
PERFIL Y DESARROLLO HISTÓRICO DE LA POLÍTICA DE COHESIÓN DE LA UNIÓN EUROPEA
Avelino García Villarejo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . «EL MERCADO INTERIOR MEDIO SIGLO DESPUÉS DE LA APROBACIÓN DEL TRATADO DE ROMA: LA ABOLICIÓN DE LAS FRONTERAS FISCALES»
Isabel Vega Mocoroa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . LA EUROPEIZACIÓN DE LA POLÍTICA PRESUPUESTARIA ESPAÑOLA
F. Javier Salinas Sánchez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . DE LA COORDINACIÓN MONETARIA A LA MONEDA ÚNICA
Jesús María Alonso Martínez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . PERSPECTIVAS ECONÓMICAS DE LOS ESPACIOS RURALES DE CASTILLA Y LEÓN: EXPERIENCIA DE LAS POLÍTICAS TERRITORIALES DE DESARROLLO RURAL APLICADAS Y PROPUESTAS PARA EL PERÍODO 2007-2013.
Pablo Gordo Gómez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ¿HACIA UNA POLÍTICA INDUSTRIAL EUROPEA?
Rosario Pedrosa Sanz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
EL ESTILO EUROPEO DE GOBIERNO DE LA EMPRESA: UN DILEMA PARA NUESTRO MODELO SOcial
José Miguel Rodríguez Fernández . . . . . . . . . . . . . . . . . COMERCIO DE DERECHOS DE EMISIÓN, CRECIMIENTO ECONÓMICO Y CUMPLIMIENTO DEL PROTOCOLO DE KIOTO EN EUROPA
Elena Escudero Puebla . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . LA RED EUROPEA NATURA 2000 DE CONSERVACIÓN DE LA BIODIVERSIDAD. LOS HÁBITATS DE LA PROVINCIA DE VALLADOLID INCLUIDOS EN LA DIRECTIVA 92/43/CEE DE HÁBITATS
Raquel Blanco Domínguez / Juan Andrés Oria de Rueda Salgueiro . . . . . . . . . . .
EL SISTEMA EUROPEO DE CUENTAS ECONÓMICAS. ORIGEN, DESARROLLO Y PERSPECTIVAS
Juan Vicente-Perdiz / María Teresa Rubio Sanz . . . . . .

Colección
Obras Generales
Materia
Obras Generales
Idioma
  • Castellano
EAN
9788498362244
ISBN
978-84-9836-224-4
Depósito legal
GR. 674/2007
Páginas
840
Ancho
17 cm
Alto
24 cm
Edición
1
Fecha publicación
23-04-2007
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